Cables bien condicionados

No se trata simplemente de una metáfora. Este problema doméstico puede desembocar en un accidente, por eso es recomendable revisar la instalación cada tanto, para comprobar que todos los cables se encuentran en buen estado. Los cables tienen que cumplir ciertas condiciones:

• No deben quedar demasiado tensos ni enroscados.

•Tienen que estar alejados del calor y de la humedad.

• No deben estar cubiertos por alfombras, mantas u otros tejidos que resulten combustibles.

• Si hay clavos o grampas cerca, asegúrese de que no dañen el plástico que recubre el cable.

• Este plástico tiene que estar en perfecto estado, ya que a través de las quebraduras podría producirse un cortocircuito.

• No conecte muchos enchufes de un mismo tomacorrientes para no sobrecargarlo.

•Los alargues deben utilizarse solamente en forma temporaria, ya que por una desconexión accidental alguien puede resultar dañado.

Cables pelados

Si el plástico está arruinado, pero los hilos no llegan a verse, recubra el cable con dos capas de cinta aisladora, abarcando dos centímetros a cada lado de la parte deteriorada.

En cambio, si los hilos están al descubierto corte la zona arruinada con un alicate y empalme los cables retorciéndolos bien. Tenga en cuenta que es más seguro dejar un hilo más largo que el otro para que los empalmes sean más consistentes y menos voluminosos.

Aisle cada cable por separado con cinta y luego cubra toda la zona del empalme con varias capas más.

Cambiar los fusibles

Cuando se produce una sobrecarga en el circuito el fusible se activa cortando la corriente. Entonces, antes de reactivar la energía eléctrica, deberá cambiarlo por uno nuevo. Asegúrese de tener en casa fusibles de repuesto adecuados para resolver fácilmente las emergencias, ya que una de las claves es no sustituir un fusible fundido por otro de mayor capacidad. Siga estos pasos:

• Identifique el fusible que debe cambiar; tendrá el visor chamuscado.

• Desconecte el interruptor general y desenchufe todos los artefactos eléctricos.

• Desenrosque el fusible fundido y reemplácelo por otro igual. Vuelva a conectar el interruptor.

• Si el fusible vuelve a saltar enseguida es que la avería está en algún punto de la instalación. En este caso, no vuelva a cambiar el fusible. En cambio, pida a un electricista que revise el circuito.

• Entonces, si el fusible no salta, vuelva a conectar todos los artefactos de a uno por vez para identificar la causa del cortocircuito.

• Si el problema se repite a menudo es una clara señal de que la instalación eléctrica y la distribución de los circuitos no son adecuadas para la carga que tienen que soportar.

• Cuando el desperfecto está en algún artefacto deberá mantenerlo desconectado hasta que pueda arreglarlo. En el caso de la llave térmica deberá simplemente encenderla cuando baje la temperatura.