Cuando se selecciona el color para pintar un ambiente del hogar lo primero que debe tener presente es la función de dicho espacio. No se debe elegir el color simplemente por ser del agrado del pintor o de quien vivirá allí pues no es lo mismo elegir el color de una prenda que el de una pared. Hay algunas consideraciones que deben tenerse en mente para no hacer las cosas por capricho. Lo primero es la orientación del lugar, así como la altura del techo, la intensidad de luz natural y el tamaño de las ventanas o entradas de luz. Luego será bueno lograr cierto equilibrio entre los colores de cada habitación. Por último es imprescindible tener en cuenta para qué se utilizará el lugar a pintar. De esta forma se irán eligiendo las tonalidades dentro de un mismo color, en función de la luz, el color dependerá también del ambiente que lo rodee, pues puede tratarse de una habitación que da a un jardín o a la calle.
