Una vez colocados, los pavimentos continuos deben recortarse para hacer que terminen exactamente a la mitad de la franja de suelo que ocupa la puerta cerrada. Esta adaptación en marcos redondeados y otros salientes, tales como frentes de chimeneas, no presenta dificultad si se sigue con la mayor fidelidad la secuencia:
Marque el rodapié y el revestimiento a 30 cm de la parede del extremo.
Desplace el revestimiento hasta dejar una separación de 15 cm entre las dos marcas.
Marque una línea con ayuda del listón de 15 cm y corte el pavimento por esta línea.
Deslice de nuevo el pavimento para adaptarlo a la pared del extremo.
Adaptación
Con un trozo de listón de madera o una plantilla, señale en el pavimento la forma del saliente para cortarla después con una cuchilla.